Viajar siempre tiene algo mágico y especial,
aunque conozcas el lugar hacia donde te diriges,
aunque sepas lo que vas a encontrar.
Siempre es una experiencia más, única y llena de sentidos,
en la que cada instante es como si fuese nuevo,
cada matiz de luz, cada paisaje en movimiento,
cada color tras la ventana.
Conversaciones cruzadas,
que se pierden con el sonido del tren
Mientras tanto, miro al horizonte del paisaje,
como si fuese una película en constante movimiento.
Mientras tanto, la lectura de un libro pasa por tu mente,
te dejas llevar.
Te paras a observar, la sonrisa de una persona, su mirada, sus manos,
y quizás surge una amena conversación.
Viajar es mágico, como la vida misma.
Y al final del trayecto, regreso a casa y todos esos recuerdos se guardan en mi.
4 comentarios:
Muchas gracias por tu comentario en mi blog, tus ánimos me dan energía positiva.
Me ha hecho mucha gracia este post, en breve me voy de viaje a París...en tren.
Un saludo.
saludos elen, de nada...
referente al viaje a paris, pues mira que a veces las casualidades no son tan cuasuales como parecen..
un abrazo y disfruta del viaje, espero que hagas muchas fotos.
Sí que es hermoso viajar. Yo, últimamente, viajo en coche y me encanta, pero también he disfrutado mucho de los viajes en tren y autocar, en los que te dejas llevar, y tienes tiempo para leer, pensar y charlar con alguien.
Viajar es sin duda un enriquecimiento...Te hace abrir los ojos, comprender, aprender...Nunca vuelves igual que te fuiste, de un viaje se viene más lleno de experiencias...enriquecido!!!
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