un mundo en PAZ

Curiosamente anoche fue cuando sentí la necesidad de enviar con una visualización y meditación, energía a este hermoso planeta.

Esa necesidad de crear una armonía que pudiese trasmitirse por todo el planeta, sin diferencias entre países, razas, culturas etc.

Ese deseo de encontrar o esperar que quizás algún día, aunque uno ya no esté para verlo, la Tierra, el hombre, encuentre su equilibrio espiritual, para poder compartir entre todos las cosas buenas y maravillosas que nos ofrece dicho planeta. La Tierra.


Esa Tierra que como una madre, permitió dar origen a la vida, a miles de seres vivos, entre ellos, el ser humano.

Y a estas alturas, como ya he dicho en otras ocasiones, nos queda mucho por aprender.

Porque si bien es cierto, todos nos vemos afectados, por fenómenos trágicos como los que hoy se han sucedido en Londres, y que sin poder evitarlo, nos recuerdan a lo que pasó en Madrid, también es cierto, que hay otros hechos, más sutiles, silenciosos que a veces dejamos pasar por alto, que no nos hacen alzar la voz, en muchas ocasiones mirar hacia otro lado.


No tiene sentido luchar y hacer guerras contra el terrorismo, cuando en si mismas, estas guerras, son un caldo de cultivo para el odio, el extremismo y el fanatismo.

El terrorismo, es cruel en todos sus géneros y variantes.

No tiene sentido, luchar contra este tipo de hechos y otros, como la avalancha de gente del mal llamado tercer mundo, al prepotente primer mundo, si con todo esto, no ponemos primero solución a un desarrollo de esos países, de su forma de vivir, de sus sistemas civiles, de su desarrollo económico, etc.

Pero ante todo, un mundo en paz, en tolerancia y armonía, se basa en el respeto hacia los demás, el respeto y la comprensión de la diversidad.

Y eso, empieza en nuestras mismas casas, en nuestro barrio, en nuestra ciudad, país.....

De nada sirve todo esto, si uno mismo no aplica esa norma de respeto y tolerancia, que algunos incluso utilizan políticamente para ganar unos votos de más.

De nada sirve, todo esto, si salimos a la calle pensando que esta es nuestra, sin respetar a las demás personas, por el simple hecho de que vayan vestidos de manera distinta a nosotros, de que sean de otro país o de que amen a personas de su mismo sexo.

De nada sirve salir a divertirse y no pensar que quizás estemos molestando a las personas que viven cerca e intentar no molestarles

De nada sirve una religión que supuestamente habla de paz y de amor, cuando en realidad, busca precisamente lo contrario, dictando palabras en nombre de un dios, que a mi modo de ver, tal y como lo representan no existe, y en su nombre se atreven a dispensar mentiras sin fundamento.

Todas estas cosas y muchas más, son algunas de esas cosas que habrá que cambiar si queremos avanzar socialmente, para respetarnos los unos a los otros.


Anoche, desee encontrarme un planeta abierto al cosmos, a todo, lleno de tolerancia, respeto, amor y fraternidad, sin fronteras, sin políticos, sin religiones..... donde todos podíamos ir a cualquier parte del planeta, como quien anda de una ciudad a otra, porque la Tierra es de todos.


Allí arriba, desde lo alto, contemplando ese hermoso planeta, quise dar un soplo, como una brisa de PAZ.