miércoles, mayo 11, 2005

mi segunda mudanza

Después de días de nervios, stress, agobios y tensiones, ahora me viene si cabe otro paso más, que en cierto modo también es un poco agobiante.

Las cajas se empiezan a amontonar y apilarse en el salón, a la espera de un nuevo destino, una nueva vida, un nuevo hogar, sin saber bien claro si será algo definitivo o algo temporal.

Cajas que como los recuerdos, guardan esos “tesoros” que vamos acumulando y que en muchos casos nos cuesta desprendernos de ellos.

Si algo bueno tienen las mudanzas es la de poder ver que a veces, tienes cosas que ya no sirven para nada, que ya no usas, o que simplemente son apegos a algo extraño y sin razón.

Y lo mejor en estos casos, es deshacerse de ello, y por otro lado, ganaremos en espacio.



Saludos y abrazos, a todos.


6 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno Oscar. Te dejo aquí mi apoyo y un abrazo :) y te escribo.

:) Animo

Unknown dijo...

Las mudanzas son algo engorroso, pero sirven de limpieza. Al menos, esa es la sensación que a uno le queda después de que termina todo el proceso.

Te estaremos esperando, amigo.

Un abrazote!

Anónimo dijo...

De alguna manera he sentido que estabamos sentados en un banco del parque y me explicabas mirandome a los ojos todo esto, así lo he percibido, a veces no quedan palabras o las que quedan están gastadas por eso yo opto por tomar las manos mientras escucho,pq es la forma en que trasmites más con menos, como aquí no me es posible. Te doy un abrazo fuerte y bueno también mi apoyo y mi cariño.

... dijo...

si estuviera cerca te diria q porunos mates te ayudo a llevar las cajas ya poner en orden tu depto nuevo, para que estan los amigos, pero no somos amigos y no estoy cerca, asi q te oferezco mi amistad lejana de este lado del rio de la plata ...
besitus
y un abrazote argentino

senda de luz dijo...

Gracias, de nuevo a todos, es hermoso sentir tanta compañía a pesar de la distancia, un saludo y abrazos.

Gracias, agua, concepción, julio, brisa, y paxzu.

PD. sigo sin internet en casa.

Anónimo dijo...

Tengo 20 años y no sé cuantas veces habré metido mis cosas en cajas y más cajas. Terminas en un lugar. Pierdes unas cosas, encuentras otras. Y vuelves a empezar.
Ánimo! Seguro que tu senda te lleva a un buen lugar :-)